jueves, 8 de marzo de 2018

Se maniene la siuación de alerta a pesar del mar en calma que predominó ayer en las costas del eje norte de Anzoátegui


La comunidad salió a recoger Guacucos / Foto: Rafael Salazar
A diferencia de épocas anteriores en los que el desastre era el resultado final, el mar de fondo que azota desde el pasado lunes las costas del eje norte de Anzoátegui, trajo consigo una sorpresa: una buena cantidad de pepitonas y guacucos.
“Ahora lo que falta es conseguir un poco de arroz y listo. Resolvimos con esta sorpresa que nos trajo la playa”, indicó uno de los residentes de la comunidad de Santa Rosa, en Urbaneja.
A la par de estas especies arrastradas a la playa, como consecuencia del oleaje, igualmente aparecieron colchones y boxsprings que miembros de Somos Venezuela, le llevaron a varias de las personas afectadas por el mar de leva de la madrugada de este martes.
Con la entrega de colchones, fue desplegado un operativo médico.
Autoridades de Protección Civil (PC) Urbaneja indicaron que, a diferencia del martes, ayer el oleaje continuó, pero no con la misma intensidad.
Sin embargo siguen monitoreando el paso del fenómeno y mantiene la restricción para el uso de las playas Lido Cangrejo, Los Canales y el zarpe de peñeros.
Residentes de Caño Salao indicaron que lograron conciliar el sueño la noche del pasado martes, luego que el mar bajara su intensidad.
Katiuska Homsi, directora de la Unidad Territorial del Ministerio de Ecosocialismo y Aguas de Anzoátegui, informó que el organismo extendió la restricción de zarpe debido a que la entidad seguirá siendo afectada hasta este viernes por el fenómeno climático.
Las cooperativas que trasladan pasajeros hasta el parque Nacional Mochima, también tienen restringidas las operaciones.

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