Al menos 650 niños y adolescentes de los municipios Píritu y Peñalver, del estado Anzoátegui, corren el riesgo de perder su año académico por el desplome de la sede de la Fundación Musical Simón Bolívar (Fudamusical Bolívar).
Padres y representantes llevan tres años denunciando el deterioro progresivo de las instalaciones de esta sede municipal del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela.
Janeth Bello, Carlos Reyes y Carolina Benítez informaron que desde 2016 han formulado los reclamos respectivos ante las autoridades municipales, regionales y el viceministerio de Educación. No obstante, el caso sigue sin obtener respuestas.
“Cada día que pasa el problema se agrava. Estamos hablando de 650 niños y jóvenes que reciben clases desde maternal y kinder musical hasta juvenil”, relató Carlos Reyes.
De acuerdo con lo informado por él, los salones más afectados son los de percusión y cello, así como el destinado para coros.
Hay evidentes problemas de humedad en todos ellos, situación que ha generado no sólo el desplome de algunos techos, sino también la proliferación de hongos, que representan un serio peligro para la salud de los niños y someten a un rápido deterioro a los instrumentos musicales.
A esto se suma el constante vandalismo al que es sometida la infraestructura por parte de desadaptados sociales que operan en la región.
Reyes explicó que a la sede municipal de Fundamusical acuden niños y adolescentes de los municipios Píritu y Peñalver.
El vocero ha adelantado gestiones con los alcaldes William Petit, de Píritu y Jhonny Gagarin Dib, de Peñalver (ambos del PSUV). Este último envió algunos vigilantes hace dos años, pero después los retiró sin dar mayores explicaciones.
“Durante las vacaciones de ese año ingresaron cinco veces en un mes, cargando con instrumentos musicales y causando destrozos en puertas y paredes – acotó Reyes –. En febrero de este año le entregué al presidente del Consejo Legislativo de Anzoátegui, diputado Pablo Cariaco, un escrito exponiéndole la situación y estamos en septiembre y aún no hemos obtenido respuesta”.
Lamenta que Petróleos de Venezuela (Pdvsa) también se desentendió de esta importantísima escuela de música que sobrevive gracias a los sacrificios que vienen haciendo padres y representantes para darle continuidad al proyecto.
Más de 1.000.000 de niños y adolescentes han pasado por El Sistema
El Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela es una obra social y cultural del Estado venezolano, con un alto concepto de excelencia musical.
Conocido como El Sistema, fue concebido y fundado en 1975 por el maestro y músico venezolano José Antonio Abreu.
Su intención era sistematizar la instrucción y práctica colectiva e individual de la música a través de orquestas sinfónicas y coros, como instrumentos de organización social y de desarrollo humanístico.
Según se desprende de la página web de Fundamusical, por lo menos 1.012.777 niños y adolescentes – en su mayoría provenientes de estratos sociales de bajos recursos económicos –, han pasado por El Sistema, se han asimilado al estudio de la música y han ejecutado repertorios de música clásica y popular, mientras obtienen formación personal y colectiva en valores sociales, morales y espirituales, razón fundamental del programa.
En los últimos años ha sido adscrito a distintas carteras del Ejecutivo. Tras la muerte de su presidente fundador José Antonio Abreu, El Sistema pasó a ser controlado por el Ministerio del Despacho de la Presidencia y Seguimiento de la Gestión de Gobierno.
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