Vendedores de dulces son cada vez más visible en las calles de Puerto La Cruz

Los postres caseros que se venden en la calle son más baratos si se pagan con efectivo. / Foto: Archivo

Ante la crisis económica que atraviesa el país, venezolanos han tenido que dedicarse a “negocios” que les permitan generar dinero de forma “rápida” y sin necesidad de mucha inversión monetaria. 

En el centro de Puerto La Cruz, muchos ciudadanos han optado por vender dulces caseros —en especial los que no requieren de muchos ingredientes—, que tienen gran aceptación. 

Por ejemplo, las famosas “tetas” (helados) han cobrado fuerza nuevamente en estos últimos meses a causa del intenso calor que se ha sentido entre los habitantes de la región.

Los comerciantes informales suelen vender las sencillas “pura fruta” entre Bs 500 y Bs 1.000. Sin embargo, aquellas que requieren materiales extras como leche, son ofrecidas en más de Bs 2000.

Las tortas, ponquecitos y panes azucarados también están entre los dulces que se venden en las diferentes esquinas de la ciudad. Estos cuestan entre Bs 3 mil y Bs 12 mil, dependiendo del producto y el tamaño.  

Majaretes, conservas de coco, suspiros y galletas caseras son otras opciones que ofrecen los buhoneros en bandejas de plástico o aluminio tapadas con grandes pedazos de bolsas.

Los interesados en adquirir los dulces pueden pagar a través de transferencias bancarias, pago móvil o con dinero efectivo. En caso de pagar con billetes, los precios pueden disminuir, ya que según los expendedores “conseguir efectivo es complicado”. 

Infantes laborando

Algo que preocupa mucho es la gran cantidad de niños que en la actualidad recorren las calles ejerciendo este tipo de actividad comercial en busca de dinero para “subsistir”.

Algunas personas consideran como ” irresponsables” a los padres de los menores por permitir que sus hijos estén deambulando en las avenidas y que no estén en escuelas recibiendo clases.