El 12 agosto 1988 se estrenó la polémica película del director, guionista, actor y productor estadounidense de cine Martin Scorsese «La última tentación de Cristo», basada en la novela del escritor griego Nikos Kazantzakis “la ultima tentación”.
Se nos ocurre que su contenido, por lo crudo y realista, recuerda en algunos pasajes la obra del escritor, poeta y periodista barcelonés Miguel Otero Silva “La Piedra Que Era Cristo”. Publicada por editorial La Oveja Negra en 1984, en Bogotá, Colombia.
La última tentación de Cristo es una película estadounidense-canadiense, dirigida por Martin Scorsese y ha sido constantemente catalogada en todos los análisis y rankings que se hacen, como una de las películas más polémicas de todos los tiempos.
Scorsese da su personal visión de la vida de Cristo. Un estupendo, atípico y controvertido film que ahonda en la vertiente más humana de Jesús de Nazaret, y que causó en su estreno una gran polémica, incluyendo boicots a los cines e intentos de prohibición, que no consiguieron sino dar más publicidad a la película.
Para un hombre como Scorsese, proveniente de una tradición tan católica, que incluso se había planteado hacerse cura en su juventud, esta película era algo así como un desafío personal.
Lo interesante y profundo de esta película, es que nos presenta un Cristo no solo divino sino humano. Desbordado por la misión que se le ha encomendado, se debate entre dudas y conflictos, entre el cuerpo y el alma, que se ve asediado por preguntas, dudas e interrogantes.
Como humano en el pleno sentido de la palabra, Jesucristo es capaz de enamorarse de María Magdalena, de sentirse atraído hacia otro tipo de vida, de sentir miedo de la tarea que tiene por delante, de flaquear frente a las dificultades.
Sin embargo, Cristo lleva a cabo su misión siendo entonces un ser digno de admiración, por haber superado los embates de las dificultades y aún así prevalecer en su camino. Es un film que nos ofrece la visión que conocemos sobre Cristo, y otra versión libre y figurativa.
Durante mucho tiempo, Scorsese, intentó sin fortuna llevar su proyecto a cabo pero las presiones de los grupos católicos más integristas complicaban todo el panorama
Pero procuró soslayar estas limitaciones con profesionalidad y pasión, llevando a cabo la que puede calificarse, sin lugar a dudas, como una de sus películas más arriesgadas, sinceras y apasionadas. Sin duda la fuerza más evidente en este proyecto encomiable es la actuación desgarrada de Willem Dafoe como Jesús.
Estamos frente a un film polémico, adelantado a su tiempo, pero que gracias al revuelo que causó en su estreno, llegó a más cantidad de personas, que se interesaron en saber de qué se trataba la propuesta de un magnífico director como Martin Scorsese.
Desde el Vaticano, hasta la Madre Teresa de Calcuta, se invitó a boicotear la película, tachada de blasfema por el mismísimo Juan Pablo II
Se consideró tan controversial por algunos fundamentalistas católicos franceses que llegaron hasta incendiar un par de salas de cine cuando se estrenó la película en París, causando un muerto y varios heridos graves entre el público.
Turquía, Filipinas, Singapur, México y Argentina, además de Chile, decidieron prohibirla absolutamente.
Después de 15 años de censura en México se reestrenó el 25 de marzo del 2004, el mismo día en que se estrenó la película de Mel Gibson, "La pasión de Cristo", una producción llena de realismo y violencia que a ratos deja sin respiración al espectador, pero basando el guión en los evangelios .
Por culpa de las protestas la película no fue bien recibida por el público aunque a la crítica le encantó, lo que hizo que Scorsese fuese nominado para el Oscar por su dirección.
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