Impenitente conspirador en el
mundo
SEBASTIAN FRANCISCO DE MIRANDA
EL HOMBRE
DE LOS MIL NOMBRES
El 25 de enero 1771, Francisco de Miranda
emigra a España en la fragata
sueca Prince Frederick, y no volverá a Venezuela hasta 1810. Sus padres habían
decidido que continuara sus estudios de francés, matemática y geografía. La
experiencia europea marcaría su vida al tomar contacto con los ideales de la
Revolución Francesa de igualdad, fraternidad y libertad.
Es, paradójicamente, en
Cádiz, en la que después murió, donde desembarca el dos de marzo de 1771, y el
catorce parte para Madrid, a la que llega el 28 de marzo, el mismo día que
cumple 21 años, para asumir, el 7 de diciembre de 1772, su recién adquirido
grado de Capitán, asignado inicialmente al Regimiento de Infantería de la
Princesa, que le costó 85.000 reales de vellón (800 pesos fuertes) con el que
participó en la defensa de Melilla contra los moros de Marruecos y los piratas
de Argel, lo que ocupó su tiempo entre 1773 y 1775. En 1780 fue destinado a La
Habana, Cuba, como capitán del Regimiento de Aragón y edecán del general Juan
Manuel Cajigal.
Sebastián Francisco de
Miranda Rodríguez, el primer criollo venezolano de dimensión histórica mundial,
acucioso autodidacto que dominaba seis idiomas y traducía del latín y del
griego, impenitente conspirador solapado bajo los nombres de señor de Merán, en
Hamburgo; señor de Meirat, en Suiza; coronel Martín de Maryland, en Roma;
coronel Mirandow, en Rusia; M. De Meiroff, en la República bátava (nombre de
Holanda hasta 1806); Monsieur de Meroud, en Francia; mister Martín, en Inglaterra
y los Estados Unidos; Gabriel Eduardo Lerroux D´Helander, en la fuga de París,
en 1798; don Pancho, un peruano, un americano, o Eleuteriatikos, en sus
artículos de prensa; y José Amindras, un anagrama de su apellido, cuando
intentaba fugarse de La Carraca, con la ayuda de algunos amigos y de su fiel
Pedro Morán, cuando la aplopejía frustró sus planes.
Creador de la Bandera de
Venezuela con los colores del Incanato, y firmante del Acta de la Independencia
venezolana, primera de la América mestiza, y para la eternidad, el mérito
sustancial de crear el concepto de América como unidad, su Colombeia, desde
México a la Argentina, como estímulo de una voluntad de lucha para una
propuesta del continente al mundo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario