JUANA RAMIREZ “LA AVANZADORA”
SEXTA MUJER EN EL PANTEON NACIONAL
Al sur del municipio Piar del estado Monagas, el 12 de enero de 1790, nació Juana Ramírez en Chaguaramal, según las normas y el santoral judeocristiano, a la madre -esclava trasladada a América desde África- la llamaron Guadalupe y a la hija la cristianizaron como Juana y Ramírez le pusieron como apellido, más por asegurarla como pertenencia y mercancía de sus patrones, que como un requisito de identidad.
Juana Ramírez, fue una esclava liberta, lavandera, que en 1813, cuando Domingo Monteverde atacó la ciudad de Maturín, junto con otras mujeres del pueblo conformó un batallón llamado “Batería de Mujeres”, quienes apoyaron las tropas de Manuel Piar, al lados de los hombres que luchaban por la independencia.
Por ir de primera en las filas contra el enemigo en el campo de batalla, se le llamó “La Avanzadora”.
Juana, estuvo en todas partes, en la batalla, en el fogón, al lado del herido y en el triunfo bailando El Atravesao. Siempre enarboló su lanza y machete e hizo retumbar cañones.
Juana Ramírez, con la pasión Patria, con su coraje luchó entre 1813 y 1814 en aproximadamente 5 batallas y se puso al frente de la “Batería de Mujeres,” en defensa de la Ciudad de Maturín, para impedir que ésta cayera en manos del ejército realista. La acompañaron en esa gesta heroica por la Independencia, entre muchas otras, las patriotas Josefa Barroso, Marta Cumbalé, Guadalupe Ramírez, Dolores Betancourt Mota, Juanita Ramírez, Rosalía Uva, Lorenza Rondón, Juana Carpio.
Juana siempre estaba presente en las luchas, y recibió el apodo de “La Avanzadora”, por ser la primera en avanzar hacia el enemigo, y en el campo de batalla realizaba diversas actividades como la de apertrechar los cañones, trasladaba los heridos a lugar seguro, velaba por los niños y los ancianos, enfrentaba a los realistas, y en una oportunidad en medio de una lluvia de balas atravesó el campo enemigo y arrancó su espada a un general realista muerto, la levantó apuntando hacia el cielo como gesto simbólico de libertad.
Juana Ramírez está enterrada en el antiguo cementerio del pueblo de San Vicente, parroquia del municipio Maturín.
En 1952, se tributó el primer homenaje popular, a Juana Ramírez “La Avanzadora”, al erigirse un monumento en su memoria en la avenida Bolívar de Maturín, posteriormente en 1975, se instituye el recuerdo póstumo a su memoria, varios institutos educacionales toman su nombre, una placa está frente a la Plaza Piar de Maturín, recordando a propios y extraños que allí estuvo situada la célebre Batería de las Mujeres, recuerdo que le erigieron mujeres maturinesas en 1913, al cumplirse un siglo de la gloriosa Campaña de Oriente.
El 11 de mayo de 1983, el Concejo Municipal del Distrito Maturín, decreta que la tumba de la heroína se convierta en Santuario Patriótico y el 25 de junio del mismo año, las autoridades municipales se trasladan allí para refrendar solemnemente el acontecimiento.
El ejemplo de Juana Ramírez la “Avanzadora,” luchadora en todos los espacios de retaguardia y vanguardia, nos llama a fortalecer cada vez más nuestra unidad política y organizativa, para que cual “Batería de Mujeres,” tengamos nuestros cañones de coraje, de lucha liberadora prestos siempre en defensa del suelo patrio y los sagrados intereses de nuestro pueblo.
Juana Ramírez “La Avanzadora” se convirtió el 23 de octubre del 2015, en la tercera heroína en ser reivindicada por la Revolución Bolivariana al ser elevada simbólicamente al Panteón Nacional y la sexta patriota en reposar en el histórico monumento donde acompaña a Manuela Sáenz, La Libertadora del Libertador (restos simbólicos), Josefa Camejo, (restos simbólicos) Luisa Cáceres de Arismendi heroína de la Independencia, Teresa Carreño, Pianista y Compositora, Ana Teresa de la Parra, Novelista y Poetisa.
Hablar de ellas es rendir homenaje a quienes desafiaron la cultura patriarcal con su valentía e intelecto para dejar una herencia histórica a los hombres y mujeres de esta Patria.
JUANA RAMIREZ LA AVANZADORA
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