Rómulo Gallegos SOLO 9 MESES Y 9 DIAS EN EL PODER ESTUVO EL PRESIDENTE MAS VOTADO DE VENEZUELA

Rómulo Gallegos

SOLO 9 MESES Y 9 DIAS EN EL PODER ESTUVO

EL PRESIDENTE  MAS VOTADO DE VENEZUELA

El 24 de Noviembre de 1948, un golpe militar depuso al presidente de Venezuela Rómulo Gallegos, considerado como el novelista venezolano más relevante del siglo XX, y uno de los más grandes literatos latinoamericanos,  y  una Junta Militar se encargó del Poder.

Rómulo Gallegos había asumido la presidencia de la República el 15 de febrero de 1948,  luego de triunfar en los comicios de diciembre de 1947 con un 74.4% de los votos escrutados, siendo además la primera vez en el siglo XX que el pueblo elegía por vía universal, directa y secreta a sus representantes,  y ha sido el Presidente de la República que ha obtenido el mayor porcentaje de votos a su favor en elecciones celebradas en el país en todos los tiempos.

A manera de anécdota, recordamos que ese día Gallegos fue entrevistado por su colega escritor y periodista Miguel Otero Silva, director de El Nacional, a quien recibió en su casa de Los Palos Grandes. A él declaró: “Son totalmente infundados los rumores alarmistas. No estoy caído ni en plan de huida, amigo mío. Usted mismo me ha encontrado en pantuflas. Y las pantuflas no se usan para correr”.

A Gallegos se le había presentado un ultimátum que incluía en los puntos más importantes: expulsar del país a Rómulo Betancourt prohibición de regreso del Teniente Coronel Mario Vargas (este ultimátum fue el día 19 de este mes), y por último, desvinculación del Presidente con el Partido Acción Democrática. Todos estos puntos fueron rechazados de plano por Rómulo Gallegos.

Nuevas conversaciones hubo, por mediación del Ministro de Defensa, Carlos Delgado Chalbaud, pero el Presidente mantuvo: “mis posiciones no son cuestiones personales sino mandato de las leyes que he jurado cumplir y hacer cumplir”.

A las once de la mañana del 24 de noviembre un grupo de militares arrestó a Gallegos y lo llevó a la Escuela Militar (hoy Academia Militar) en Fuerte Tiuna, junto con familiares y colaboradores. Las detenciones de líderes políticos y funcionarios del gobierno se sucedieron durante toda la mañana. Mientras tanto, el ejército patrullaba las calles de la ciudad en unidades blindadas.

Así, se dio el “golpe” y la Junta quedó integrada por Carlos Delgado Chalbaud, Luis Felipe Llovera Páez y Marcos Pérez Jiménez.

El golpe militar estuvo dirigido por Carlos Delgado Chalbaud quien  traicionó a Rómulo Gallegos, pues hasta ese momento era el Ministro de la Defensa del gobierno presidido por Gallegos, Marcos Pérez Jiménez y Luis Felipe Llovera Páez.

Estos tres militares junto con Rómulo Betancourt fueron también los principales cabecillas del golpe de Estado contra el Presidente Constitucional, Isaías Medina Angarita cuando apenas le faltaban escasos meses para terminar su período de gobierno

.Posteriormente, con el asesinato de Delgado Chalbaud, pasó a presidir la junta el Dr. Germán Suárez Flamerich.

 Más tarde, desde 1952, el verdadero beneficiario del golpe, Marcos Pérez Jiménez, pasó a mandar hasta enero de 1958. Nada nuevo bajo el sol.

Múltiples fueron los factores que incidieron en la crisis política e institucional que derivó en la caída de Gallegos. Por un lado, el partido de Gobierno (AD), que se estableció en el poder luego del derrocamiento de Isais Medina Angarita, el 18 de Octubre de 1945,  y en el que se sustentaba Gallegos, comenzó a ser tildado de sectario al ocupar los principales cargos de la administración pública con sus partidarios.

Un aspecto negativo de ese periodo fue la pretensión hegemónica y sectaria de los adecos quienes querían gobernar solos, el constante canibalismo político y los enfrentamientos con la iglesia, con los partidos de oposición, con la prensa, con sectores económicos que vieron amenazados sus privilegios y con los militares, quienes habían ayudado a los civiles a tomar el poder y tenían aspiraciones que no se habían concretado.

En tal sentido, en poco tiempo AD creció rápidamente como organización, creando un grupo monopolista del poder, denunciado por la oposición. Asimismo, los niveles de intolerancia de la militancia llegaron a extremos tales de sabotear los mítines de los partidos de la oposición-en especial de COPEI-y de asambleas sindicales, que en muchos casos llegaron a las agresiones físicas.

Por otra parte, la unión cívico-militar instalada el 18 de octubre de 1945 se empezó a debilitar, una vez que los miembros de las Fuerzas Armadas comenzaron a verse como los socios minoritarios de un proceso político que ellos mismos habían iniciado. Esta situación empeoró con las acusaciones de los jefes militares de que AD estaba organizando milicias partidistas armadas e intentaba conquistar adeptos en las filas del ejército, además de querer penetrarlas, al hacer que jóvenes de su confianza se inscribieran en las academias militares.

El descontento provocado por la penetración de los adecos en la institución castrense, produjo por tanto diversos intentos localizados de alzamientos cuartelarios, que los mandos militares debieron sofocar para mantener la unidad y la disciplina de dicha institución; sin embargo, las presiones castrenses por el derrocamiento del gobierno continuaron.

Finalmente, ante la presunción de que la dirigencia de AD y la CTV convocarían a una huelga general para hacer una demostración de fuerza, los militares decidieron actuar y el 24 de noviembre de 1948 derrocaron al gobierno, poniendo fin a la alianza concertada con AD para la obtención del poder en octubre de 1945.

El mismo 24 explican, en cadena radial, los motivos del golpe: “Las fuerzas Armadas Nacionales, ante la incapacidad del Gobierno Nacional para resolver la crisis existente en el país, en vista de la intromisión de grupos extremistas en la vida nacional, puesta de presente en la mañana de hoy por la decisión de una huelga general de consecuencias incalculables y ante la incitación a las masas para cometer actos vandálicos y alterar el orden, han asumido plenamente el control de la situación para velar así por la seguridad de toda la Nación y lograr el definitivo establecimiento de la paz social en Venezuela”.

De esta forma termina el breve mandato del gran escritor venezolano. El 5 de diciembre, Gallegos es trasladado en avión a La Habana junto con su esposa doña Teotiste, sus hijos y otros parientes. Comienza para él un exilio que duraría diez años y en Venezuela una dictadura militar de una década.

Rómulo Gallegos desde su exilio en La Habana afirmó que quienes lo habían derrocado fueron los Estado Unidos y los intereses de las transnacionales petroleras.